Pensamientos intrusivos

Autor: Florencia Diamela Portal , 19/05/2025 (234 vista)
Pensamientos obsesivos, Emociones y sentimientos, TOC
Pensamientos intrusivos

Identificando lo que me pasa, puedo entender, ayudarme y acompañarme. ¿Qué son los pensamientos intrusivos? ¿Que tipos de pensamientos hay comúnmente? Que herramientas puedo utilizar PARA ENFRENTARLOS?

Te aparecieron pensamientos raros de la nada?

Tranqui. No estas sola.

Hay veces que, sin pedirlo, nuestra mente lanza pensamientos rarísimos:

- 'Y si de repente me caigo al tren?'

- 'Y si lastimo a alguien sin querer?'

- 'Y si todo esto termina mal?'

Son pensamientos intrusivos: aparecen sin invitación, son incomodos, y a veces hasta nos asustan o hacen

sentir culpables.

Que son los pensamientos intrusivos?

Son ideas o imágenes que:

- Aparecen sin querer

- Se repiten aunque quieras que se vayan

- Generan malestar, miedo o vergüenza

- No tienen mucho que ver con vos ni con lo que queres

No sos vos. Es tu mente tirando cosas sin filtro.

Tipos comunes de pensamientos intrusivos:

- Violentos: imaginar que te haces daño o que lastimas a alguien

- Contaminación: sentir que todo esta sucio o que te podes enfermar

- Sexuales inadecuados: pensamientos incomodos o que no querías tener

- Dudas constantes: cerré la puerta? hice algo mal?

- Contra tus creencias: ideas que van en contra de lo que valoras

Herramientas para enfrentarlos:

Guía para gestionar pensamientos intrusivos

1. Desobedece a propósito

Camina por la habitación diciendo:

"No puedo caminar por la habitación."

Hacelo. Vas a ver como tu cuerpo y tu mente no siempre están alineados.

Este simple ejercicio ayuda a soltar el control sobre los pensamientos.

2. Ponele nombre a tu mente

Y si en vez de discutir con tus pensamientos, los tratas como si fueran una persona que te habla todo el

tiempo?

La mía se llama Lisa. La tuya?

Cuando aparece, le digo: "Gracias Lisa, pero no te pedí opinión hoy".

3. Cámbiale la voz a ese pensamiento

Decilo como si fueras un personaje de dibujitos o un político que no te cae bien.

Darle otra voz ayuda a quitarle poder.

4. Deci "Alto!"

Cuando aparezca ese pensamiento incomodo, imagina un cartel de STOP o un semáforo rojo.

Después, cambia el canal: pone música, salí a caminar o llama a alguien.

5. Reestructura lo que pensas

Identifica el pensamiento Pregúntate si es cierto. Busca pruebas. Reemplázalo por uno mas amable.

Ejemplo:

- "Soy un fracaso"

- Es verdad? Siempre fue así?

- "Cometí errores, pero también tuve logros. Puedo seguir creciendo".

5. Mini diario de observación de pensamientos

Esta herramienta es muy simple, pero poderosa.
La idea es anotar durante unos días los pensamientos intrusivos que aparezcan y cómo reaccionás frente a ellos.

Usá esta estructura:

Pensamiento: ¿Qué apareció? (“Y si tengo una enfermedad grave”)

Emoción: ¿Qué sentí? (miedo, angustia, tensión)

Respuesta: ¿Qué hice? (busqué en Google, traté de distraerme, lloré)

Comentario compasivo: ¿Qué me diría una versión amable de mí misma? (“Estoy asustada, pero eso no significa que esté en peligro”)

Hacer esto te permite ver patrones y tomar distancia. Es un paso clave para dejar de identificarte con esos pensamientos.

6. Pensamientos intrusivos y el miedo a lo que “significan”

Uno de los mayores temores que tenemos con los pensamientos intrusivos es que “signifiquen algo terrible” sobre nosotras/os.

Pensar “¿Y si empujo a alguien?” no significa que seas violenta. Imaginar algo sexual inapropiado no significa que lo desees.

Son pensamientos automáticos, muchas veces sin sentido, aleatorios, o generados por ansiedad.

Lo que sí dice algo sobre vos es cómo te sentís al respecto: la culpa, la incomodidad, las ganas de entenderte.

En terapia, trabajamos mucho esto: separar pensamiento de identidad. Porque vos no sos tu mente. Y definitivamente, no sos tu peor pensamiento.

Si podés empezar a observarlos como si fueran nubes que pasan por el cielo (raras, incómodas, pasajeras), vas a recuperar libertad. Y si no podés sola/o, pedir ayuda no es debilidad: es inteligencia emocional.

 

Mensaje final

Tu mente a veces se va por caminos extraños.

Pero vos no sos tus pensamientos.

Podes observarlos sin pelearte con ellos.

Y si necesitas ayuda, esta bien pedirla.

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