Creo que las características de mi personalidad y valores definen cómo soy cómo persona y me han resultado muy útiles para acompañar a personas en su dificultad. Las últimas investigaciones demuestran que el vínculo terapéutico es el aspecto fundamental que proporciona efectividad en los tratamientos. Esto implica una actitud de aceptación incondicional con el paciente, ya que tengo la capacidad de indagar con curiosidad genuina sin que las personas se sientas juzgadas. Genuinamente me importa ayudar a los demás y en este punto me han demostrado que ha resultado fundamental a la hora de que los pacientes se sientan cómodos y apreciados en la terapia. Poseo muy buena memoria y me organizo para apuntar aspectos importantes o mantener organizados los objetivos del tratamiento. Pero fundamentalmente la empatía y la compasión son fundamentales ya que sentirse sentido y acompañado en el sufrimiento es clave para ayudar a sanar las heridas de las personas.

La psicoterapia me ha ayudado a conocerme, a establecer valores, fortalezas y objetivos en mi vida. A poder afrontar situaciones estresantes y difíciles con valentía y resiliencia.