Psicóloga clínica, perito Forense en abuso sexual y maltrato ) acreditada en las Cortes de Apelaciones de Chile), psico- oncóloga, experta en trauma e intervención en crisis.

A continuación, te menciono algunos de los cambios que he experimentado:

Mayor autoconciencia: Como psicóloga, la psicoterapia te permite explorar tus propios pensamientos, emociones y comportamientos, lo que aumenta tu autoconciencia y te ayuda a reconocer y manejar mejor tus propios sesgos y reacciones emocionales en la práctica clínica.

Empatía y comprensión: Haber estado en el lugar del paciente me hace más empática y comprensiva hacia los desafíos que enfrentan mis propios pacientes. Comprendiendo mejor las resistencias, las dificultades para abrirse y la importancia de sentirse escuchado/a y comprendido/a.

Mejora en la relación terapéutica: Experimentar la psicoterapia me da una perspectiva interna sobre la relación terapéutica, permitiendo afinar mi habilidad para construir una alianza terapéutica fuerte y segura con mis pacientes.

Desarrollo de técnicas y enfoques: Al estar del otro lado del proceso, puedo observar de primera mano diferentes técnicas y enfoques terapéuticos. Esto no solo amplía mi repertorio de herramientas, sino que también me ha permitido evaluar cuáles son más efectivas desde la perspectiva del paciente.

Reducción del burnout: Participar en psicoterapia me ha sido una herramienta poderosa para la auto-cuidado, ayudándote a manejar el estrés y prevenir el burnout, algo especialmente relevante en profesiones de ayuda como la psicología.

Reflexión ética y profesional: La psicoterapia puede estimular una mayor reflexión sobre las cuestiones éticas y la importancia de mis propios límites profesionales, lo cual es crucial para mantener una práctica ética y profesional.