Soy una persona que se proyecta y es sumamente empática, analista, buen criterio propio y profesional.

Veo los problemas siempre desde un aspecto general para posteriormente ir aterrizando en la raíz del problema.

De mente abierta por elección y con un gran ímpetu por la justicia social e individual.

Me gusta prepararme día a día para ofrecer un servicio de calidad. Me ajusto a las posibilidades de cada paciente y su estilo de vida, así como su situación particular.

Después de todo, no son un caso más en un archivo, sino seres con problemas particulares y distintos que requieren atención particular y distinta.

Al ser un joven mexicano en una sociedad altamente demandante, superficial y estresante, la psicoterapia me ha ayudado a entender mejor los procesos mentales y sociales por los que tenemos que cruzar para poder llegar a ser una versión que no sienta culpa por ser quién es y de mostrarse frágil e imperfecta. Sé que la psicoterapia no hará que me vuelva una persona sin problemas, pero me ha ayudado a entender que puedo tener una mejor calidad de vida, obviamente cuidando todas las esferas de mi vida y saber que si un problema no tiene solución debe de estar fuera de mi mente y si sí tiene solución, luchar por mejorar. Claro, todo esto para mí, y saber compartirlo con los demás.