Llevo ejerciendo como psicóloga desde tercero de carrera que viajé a México para conocer el país. Allí estuve trabajando de manera remunerada bajo la tutorización de la psicóloga sanitaria del centro de rehabilitación del pueblo de Cholula. Siempre he tenido muy claro que quería estudiar psicología, entender la conducta humana, pero hasta entonces no supe a qué rama de la psicología quería dedicarme. El Centro de Rehabilitación Integral de Cholula (México) me permitió ver el lado más sanitario de nuestra profesión y desde ese momento no me he dedicado a otra cosa.

En México también aprendí otras orientaciones de las que hasta entonces me habían enseñado en la Universidad de Sevilla, más humanistas y psicoanalistas. De esta experiencia de más de un año, comprendí que no es suficiente abordar a la persona con una sola orientación psicológica y es por ello que actualmente mi enfoque es más integral, bajo una orientación cognitivo-conductual y psicodinámica.

Trabajar como psicóloga ha sido todo un desafío profesional y, sobre todo, personal.

A día de hoy, después de 5 años de carrera profesional, sigo actualizándome y formándome no solo en universidades y academias, sino también en el feedback que recibo de mis pacientes. Para mí es un orgullo trabajar de lo que siempre me ha apasionado y es extremadamente gratificante poder ver el proceso evolutivo de las personas que atiendo.